jueves, 18 de mayo de 2023

23 de junio de 2019- Domingo.

 


Hace tiempo que no escribo nada. Estoy teniendo un final de curso complicado, como siempre. Pienso mucho en la memoria. La memoria es tu pasado. Sabes que algunos relojes esconden el tiempo; ese que se funde contigo y con toda tu existencia. Algo se está derritiendo alrededor…Quizá por aquí encuentres la verdad que buscas, la que te conecta con este mundo al que irremediablemente perteneces…Y si algún día ya no sabes expresar quién eres colgaremos un cartel donde podrá leerse:

CREACIÓN DE RECUERDOS CERRADA POR REFORMAS

Sin embargo, las palabras no avanzarán nunca desnudas; lucharemos juntos para que queden arraigadas a algunas percepciones, a ciertos pensamientos. Perdurarán las rocas y el paisaje…y tú, fugaz y relativo, quedarás presente, aunque el tiempo se evapore, aunque el espacio se altere.

Me gusta este lugar donde las líneas horizontales se combinan con el mar, donde las ramas de los árboles te invitan a pensar y aunque sea en diagonal, la forma de tu pasado se traducirá en recuerdos…recuerdos de tu propia vida.

 


Continúo transcribiendo textos que tengo escritos desde hace mucho tiempo. Son editoriales de la Revista Gealittera. La dirigí durante tres años y medio junto a la escritora argentina Cecilia Ortiz. Mensualmente nos dábamos cita para escribir y llegamos a tener un poder de convocatoria importante. Tierra de letras, tierra de otros: los que se dan cita para leer y escribir; para imaginar y crear.

 

 

MIRADA es la observación visual que se efectúa de algo. Implica una expresión de quien la emite. Podemos recibir miradas de otro o podemos mirarnos a nosotros mismos haciendo un ejercicio de introspección. Es la mirada la ventana de nuestro cuerpo, nos permite divisar nuestro interior y refleja de manera sincera nuestros sentimientos y emociones. Hay miradas frías, distantes, miradas que manifiestan tristeza, enojo, amor, protección, consuelo. Hay miradas impenetrables, intensas, profundas…En cualquier caso mirar significa realizar una determinada valoración sobre algo o sobre alguien. Mirar también es dar un significado a lo que nos rodea; mirando podemos traspasar la realidad y encontrar algo singular; la singularidad que encontramos para nuestra escritura. ¿De cuántas maneras miramos? Construir relatos jugando con los enfoques de la mirada de narradores o personajes, o conseguir el ritmo del poema jugando con su efecto visual son dos recursos productivos.

Hemos puesto miradas en palabras. Poéticas miradas, insinuantes miradas, seductoras miradas. Algunas intrigantes, otras desde el corazón que mira con su manera especial de hacerlo. Descubrir un universo de miradas. Y todas están aquí, están en ti.


 

AROMAS es el término que nos trae el olor más agradable. Me refiero, claro está a ese olor a palabras, a poemas recién escritos y a historias narradas. Dejamos de lado, pues, aquello que no podemos percibir por el olfato y buscamos fragancias y perfumes con los que matizaremos nuestros relatos y nuestros versos.

Centrarnos en uno de los cinco sentidos para abordar todas las sensaciones posibles que se puedan desprender de él. De esta forma el sistema sensorial olfativo será la clave para buscar literariamente aromas en letras, sílabas y palabras. Tendremos en cuenta que el sentido del olfato es el primero que se desarrolla y que en los seres elementales, es el primero que indica peligro, comida, apareamiento.

Nos sumergiremos en aquellos aromas que han sido los compañeros de nuestra infancia, de nuestros placeres, de nuestra vida. El olfato jamás se equivoca. Es parte de nosotros y siempre nos ha llevado hasta los rincones olvidados.


 

Hablemos de las MENTIRAS. Son engaños intencionados y conscientes. Se trata de simular y fingir, teniendo en cuenta que las ficciones, aunque falsas, no se consideran mentiras. Hay algo atractivo, desde el punto de vista literario, en la mentira porque la mentira es capaz de ocultar la realidad de forma total o parcial y esto es emocionante. Hay mentiras que duelen y mentiras que ponen en duda algunas verdades. Si nos lo proponemos quizá podríamos calcular el tamaño de una mentira. Hay mentiras útiles y las hay malignas. Algunas pueden hacer gracia y otras no. Mentiras verdaderas o verdades mentirosas. He aquí la cuestión.


 

Del latín Desidium, DESEO es la acción y el efecto de desear (anhelar, sentir apetencia, aspirar a algo). El concepto permite nombrar el movimiento afectivo o el impulso hacia algo que apetece. El deseo, sea del tipo que sea, y su satisfacción forman parte de la naturaleza humana. En el origen de cada deseo siempre hay una emoción, un sentimiento. Podemos hablar de cómo nuestra voluntad se inclina hacia la consecución de algo. Deseo como aspiración, como ansia, como afán, como anhelo, como apetito, como empeño, como antojo, como pasión, como ambición, como interés.

Elegir un deseo, tipificarlo, definirlo y darle forma literaria para que a partir de ese mismo instante quede expresado.

Hasta que el deseo no se consigue es abstracto y reincidente, es impulsivo y un poco irracional, es mágico y nostálgico y siempre, siempre está unido a los sueños, a la fiesta, a los regalos, a las tartas, a las velas, al paso de los años. El deseo siempre se mantiene unido porque su meta es la felicidad. Por supuesto no me olvido de la parte erótica del deseo: los labios, la piel, el sexo, su eterna lucha contra la rutina, las manos y sus caricias, el amor y el desamor.


 

Existe un significado para cada SUEÑO. Quizá podríamos confeccionar un diccionario de sueños. Me gusta pensar en el color de los sueños, en el valor de los sueños, en esa dimensión altamente maravillosa que los aleja de la realidad. Me gusta pensar en los sueños como evasión, como escape, como refugio y también pienso en fábricas de sueños que trabajan a ritmo rápido para que nunca se acaben. En el proceso de soñar mezclamos imágenes, sonidos, pensamientos y sensaciones. Traducirlos en ideas, en palabras, en poemas, construir escenas, personajes, objetos, escenarios…Y que al despertar no se detengan.

 


 

¿Qué se oculta tras las MÁSCARAS? ¿Intenciones? ¿Símbolos? ¿Temores? ¿Aspiraciones? Puede ocurrir que una máscara oculte el miedo a una tempestad, a un animal salvaje, a un espíritu. ¿Por qué cubrirse la cara y relegar el rostro a un segundo plano? Estos motivos se pueden poetizar o se pueden narrar. Detrás de una máscara puede habitar la alegría de vivir, puede residir la verdad más absoluta, el respeto ante la muerte, las dimensiones ocultas de la mentira. Pero sobre todo una máscara oculta quién eres. Podemos escribir sobre ese anonimato que solo nos permite reconstruir un rostro a partir de unos ojos. Es misterio, es poesía, es una historia que espera ahí, latente.

 


 

La TORMENTA es una tempestad de corta duración y especialmente violenta. Las nubes, las masas de aire, las diferentes temperaturas…desembocan en una inestabilidad que se caracteriza por la lluvia, el viento, los rayos, los relámpagos, los truenos o incluso el granizo.

Hay tormentas en el cielo pero también las hay en nuestro interior. Sí. Siempre que se combinan fuerzas opuestas capaces de desatar los sentimientos más eléctricos.

¿Hay poesía en las tormentas?, ¿hay una historia detrás de una tormenta?, ¿hay tormentas de ideas?

 


 

REFUGIO es un espacio habitable protegido contra los efectos de todo aquello que no nos gusta, de todo lo que nos hace infelices, de todo eso que nos proporciona desamparo.

Buscamos cobijo, protección, nos resguardamos de la lluvia, del dolor, de la tristeza. Nos refugiamos para hacer lo que más nos gusta, que es escribir. Nos ocultamos para dar rienda suelta a nuestra creación literaria que siempre perfilará las líneas que definen eso que nos hace sentir bien, seguros, protegidos, plenos…

miércoles, 17 de mayo de 2023

LETRAS Y VOCES. CERTAMEN DE POESÍA BREVE ESCRIBIR EN LIBERTAD.

En la Revista mexicana Letras y Voces y dentro del Certamen de poesía breve ESCRIBIR EN LIBERTAD, seleccionan un poema de mi autoría para publicarlo. 

Muchas gracias por considerar mi texto.







LA CANCIÓN DE MARA

 Os presento mi nuevo libro 




En Lisboa, Mara canta fados.


LA CANCIÓN DE MARA es prosa y es poesía, es Lisboa y es una cantante de fado que defiende con pasión un amor no correspondido.
Mara siente y expresa, canta y espera… Y al final ella se fundirá con la derrota, sí; pero también con la dignidad que supone la certeza de un nuevo destino.
Mara desconoce hasta qué punto nos enamora a todos los que la leemos. Por la magia que desprende, por ese vocabulario de rocas, tierras, caminos y mar. Por esa lucha constante consigo misma para no darse por vencida, por la pasión que se deriva del amor que siente; porque es sincera y porque cuando la derrota llega para instalarse, se bate en retirada con su propia dignidad, que es ya lo único que le queda. Mara es un espejo en el que cada uno de nosotros puede verse reflejado; en los recuerdos de otro tiempo; en la memoria de otro lugar o quizá en la certeza de nuestra realidad más inmediata. ¿Quién sabe? En cualquiera de los casos, Mara siempre nos hace vibrar.

Al final del libro encontrarás un código QR desde el que podrás escuchar una música que sale del alma; la belleza sonora y poética de los fados en la elegante y exquisita interpretación de MINHA LUA




GRACIAS A DAIREA EDICIONES.