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| IMAGEN: IGOR ZENIN. |
Noté cómo se precipitaban las sombras desnudas
y lentas; agudas e inmensas. Los ruidos de promesas escaparon por
debajo de las puertas. Palabras desvanecidas. Significados ingrávidos.
Tus pasos...ya tan lejanos, no volverán jamás. Caigo desplomado
sobre una silla vacía. No sé dónde estoy pero siento que me rindo ante
este silencio roto...Y es que por debajo de mí, todos los suelos se
desintegran.
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