martes, 3 de septiembre de 2013

NATA MONTADA




Ahora la soledad del invierno se cubre con un paraguas violeta.

Estoy cansado de acudir a las mismas citas

Las puertas cerradas
Los jardines rojos
Las orillas estrechas
Los pulsos indefinidos

Midiendo fuerzas solitarias
Pisando sueños ficticios
Mezclando números sobre azulejos blancos
Y cayendo todo el tiempo que falta.

Podríamos considerar los paseos cerrados
Y los años descansando sobre sillas viejas
Y los pasos irregulares
Desviando el rumbo de las horas
Oliendo bares definitivos

Nadie sobre las frías superficies
El mundo parece deshabitado
Y un tranvía amarillo entrando en la ciudad definitiva

Muros con hiedra
Cruzo puentes que parecen cansados de existir
Debajo... el agua sucia

Mezclo nata en un recipiente de cristal

Crujir de maderas
Ropajes lentos
Nadie en las calles

Mi corazón trabaja despacio
Como si se sintiera viejo
Como si fuera un reloj a punto de detenerse

No hay comentarios: